Crecimiento espiritual

El crecimiento espiritual es el proceso de llegar a ser más maduro en la relación con Jesucristo. Alguien que está creciendo espiritualmente se volverá más y más como Cristo. Los espiritualmente maduros podrán «distinguir el bien del mal» (Hebreos 5:14). El crecimiento espiritual comienza en el momento en que una persona llega a la fe en Cristo y debe continuar hasta que una persona entre a la presencia de Cristo después de esta vida.

La participación en una iglesia de la localidad y el ejercicio de nuestros dones espirituales son invaluables para el desarrollo de la madurez (Efesios 4: 11-16). En lugar de dejarse influir por todas las doctrinas erróneas que se presenten, podemos hablar «la verdad en amor», con el resultado de que «creceremos hasta ser en todo como aquel que es la cabeza, es decir, Cristo.» (Efesios 4: 15).